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| OBSESIÓN |
...De repente oyó un ruido, se le heló la sangre y no supo cómo reaccionar, tan rápido como pudo enterró a su víctima invadido por una extraña premonición. La fría noche lo envolvió como una segunda piel mientras escarbaba con sus propias manos el suelo, los entumecidos dedos trabajaban mecánicamente.
Estaba poseído por la locura, con los ojos inyectados de sangre continuó con su infame labor. Al lado izquierdo de él, tendida sobre la hierba yacía aquella a quien se negaba a mirar, a la que alguna vez hubo amado.
Le recorrió un extraño temblor al concluir la fosa. Se arrodilló aún sin mirar el cuerpo inerte de la mujer . Vio la fosa, a sus ojos, inmensa, un agujero negro, sin fondo-"Como mi alma"-pensó. Rió sin alegría, un simple sonido desprendiéndose de él y se obligó a observar al cuerpo que enterraría.
"Claudia"-farfulló débilmente inclinándose.
Ella estaba allí, los ojos que antaño brillaban al sonreír, estaban abiertos, congelado el ceño en un rictus de terror, pero a pesar de todo hermosa y distante.
-Todo esto es tu culpa!-gritó enloquecido . La cogió de los hombros y la empezó a sacudir-Tu culpa, tu culpa!...
Miró fijamente el rostro de Claudia, sin expresión alguna debido a la falta de vida, el laxo cuerpo, la cabeza colgando a un lado y sobre el pecho virginal una mancha de sangre. Era el único signo de la puñalada recibida.
-Hace una mañana exquisita-la recordó hablando ese mismo día, toda llena de vitalidad, sonriendo y usando el mismo vestido verde que llevaba ahora puesto. Claudia, parada, el sol le iluminaba el semblante y ella ,hacía el almuerzo , y él observándola ,embelesado solo atinaba a quererla aún más. La amaba. ¿Lo sabía ella? Si,lo sabía, lo notaba en la forma especial en la que le sonreía a él ,aquellos ojos del color del chocolate derritiéndose únicamente por él.
Volvió al presente. Claudia, muerta, en sus brazos, y él acunándola torpemente en su regazo.-"Te amo!"-rugió. Las lágrimas cayeron sobre sus mejillas entorpeciéndole la visión.-Claudia-arrulló-mi Claudia.-la apretó contra sí-Eres mía. Solo mía.
Pero entonces la había visto besarlo, en frente suyo, el frondoso cabello de Claudia ,había nublado en un principio el rostro del hombre a quien ella abrazaba. Él sentado en la mesa cercana a la cocina, presenciaba la escena inmóvil. Ella era suya, de nadie más...y entonces ¿que hacía aferrada a otro?
-Cariño-había dicho Claudia, rebosante de vida- este es mi compañero de la facultad de medicina-No sé si lo conoces, pero es un gran amigo mío.
-Hola-había saludado el otro, tendiéndole la mano. Él, de manera automática oprimió la mano dada. Y lo odió.
Con el alma bullendo por dentro había conversado con ambos de una manera natural,pero por parte de él,fingida. Odiaba a aquel hombre,por besarla, mas Claudia,su dulce Claudia era la verdadera impostora. Se vengaría,juró en silencio. Lo haría por el bien de Claudia y el suyo mismo.
Cuando al fin quedaron ambos solos, no supo que hacer. Era su Claudia,la amaba,y estaba seguro que ella también lo amaba. Tal vez ,solo tal vez, ella no se diera cuenta, en fin ,era mujer, y vanal .
-¿Sabes?-le dijo inesperadamente ella ,rompiendo el crudo silencio- Nunca pensé que diría esto, pero...Lo amo-los ojos le brillaban, ardientes de una pasión que no iba dirigida a él. "No lo hará por mucho tiempo" se dijo impávido, escondiendo el puñal en la espalda, que antes solo le brindaba protección contra los maleantes, aunque nunca lo hubiera usado.
-Es tan raro-susurró Claudia-,nunca pensé que me fuera a enamorar así- siguió contando-Me siento en las nubes-una sutil sonrisa cubrió sus labios.
Él, impasible, se acercó a Claudia y le preguntó -¿Lo amas en verdad, Claudia?
-Yo...-Claudia rió-¡Claro que lo amo!
Eso era todo, ya lo sabía. Rabioso, sacó el puñal del escondite y se lo clavó, sin asco ni remordimiento.
Claudia soltó un sonido gutural y empezó a retorcérsele el cuerpo, sintió a las delicadas uñas de ella hundírseles en los brazos ,aferrándose ella a la poca vida que se le iba.-Ppporr qqque?-preguntó con los ojos vidriosos
-"Porque- tiró del puñal-yo...-lo volvió a hundir-Te amo.
Y ahora estarían juntos -"Estaremos juntos, mi amor- la arrulló- Por siempre. Lo prometo".
Cuidadosamente la colocó en la fosa. El agujero que los cobijaría a ambos pensó. "Al fin juntos"
F I N
Autora: Liz Matta Durán
